sábado, 5 de mayo de 2012

YO TUVE LA SUERTE DE VERTE JUGAR


Frédéric Oumar Kanouté, hoy se despedirá de su afición el mejor jugador que ha tenido el Sevilla en todos los tiempos.
Hablar de Kanouté como futbolista me parece casi una impertinencia porque todos conocemos lo grande que ha sido para el Sevilla Fútbol Club.
Algunos blogueros están escribiendo sobre toda su trayectoria hasta su llegada al Sevilla, pero a mí lo que me interesa es su estancia entre nosotros.
Recuerdo perfectamente el día que llegó. Tuve la suerte de estar presente en la sala de prensa del Pizjuán (aun era la antigua) cuando fue presentado a los medios de comunicación. Entonces aun te llamaban a veces para completar el aforo en determinados actos y como miembro de la Federación de Peñas pues acudíamos, faltaría más.
Hoy será la despedida del más grande que se ha puesto nuestra camiseta. No sé cuantos minutos jugará pues parece que su estado físico no es el mejor, pero sean los que sean, merecerá el aplauso unánime de todos los que estemos presentes.
Desde aquel día de su presentación, hasta hoy han ocurrido muchas cosas y todas las que tienen que ver con Kanouté han sido maravillosas.
Espero que el Sevilla esté a la altura (no solo hoy, que le ha venido como agua de mayo esta despedida para tapar las vergüenzas de la temporada) y le de el puesto que debe ocupar el MEJOR JUGADOR QUE HA TENIDO EL CLUB EN TODA SU HISTORIA.
Pues eso amigos, yo tuve la suerte de ver jugar a Kanouté, al igual que tú y que todos los que estáis leyendo este post y sería bueno que trasladáramos la grandeza del Malí a generaciones venideras.

viernes, 4 de mayo de 2012

¿EN QUÉ HAN CONVERTIDO AL SEVILLA?

Jugadores que profieren insultos en el campo, futbolistas que se pelean cual “pandilleros callejeros” en los entrenamientos, aficionados que apedrean el autobús de su propio equipo, división absoluta en las gradas a la hora de presenciar los partidos, crispación y sentimiento de estafa por el precio pagado por los abonos. Rumores que apuntan a una rotura de contrato con una firma con la que se acababa de firmar por seis años (habrá que conocer el montante), regalo de entradas en la mitad de los partidos despreciando y mofándose de los abonados. Unos medios de Comunicación propios (ojo, salvo a los magníficos profesionales que allí desempeñan su función, y que están bajo las órdenes de su jefe) que intentan vender una realidad absolutamente distinta  a la que todos palpamos.

Este es el Sevilla de principios de Mayo del año 2.012. Y yo me pregunto ¿dónde está ese espíritu de trabajo y compañerismo que existía cuando en el año 2.005 estábamos preparando los factos del centenario. Y hablo de esa época, porque a uno le tocó vivir de cerca, desde dentro de las entrañas del Pizjuán, el día a día del Club, el trabajo sin descanso de muchos sevillistas, que altruistamente estábamos horas y horas preparando multitud de actos.

Aquello era distinto. A una llamada de teléfono acudíamos un buen número de “voluntarios” a ponernos teléfono en mano, delante de un ordenador o simplemente dictando una tras otra todas las peñas que el Sevilla tenía para hacerles llegar algún comunicado.

Cuando llegaba la hora de viajar, lo hacíamos con el equipo en el mismo chárter. Estábamos hasta dejarnos la voz animando a los nuestros en los campos de toda España. Los precios eran asequibles y la facilidades todas para poder acompañar a nuestros jugadores y técnicos.

Fueron cientos los actos de Peñas a los que acudimos, haciendo de taxistas de jugadores, directivos y técnicos. Pero lo hacíamos con la ilusión de verles la cara a los anfitriones que demostraban su orgullo de ser sevillistas.

Noches de volver a casa a horas intempestivas, de madrugones posteriores para de nuevo al día siguiente desarrollar otro cometido. Cada uno era como era. Como siempre fue la afición del Sevilla, pero había una cosa clara, todos remábamos hacia el mismo sitio.

Por eso me pregunto ¿en qué han convertido mi Sevilla?. No lo entiendo. Hoy todo son comportamientos ariscos. Hoy las puertas que  antes estaban abiertas para poder desarrollar el trabajo, se encuentran cerradas. Hoy el Sevilla se ha convertido en una Sociedad opaca donde todo tiene que pasar determinados filtros. El Sevilla Fútbol Club ha dejado de ser lo que fue, de los sevillistas, para pasar a ser controlado por un “ingente” número de “seguratas” que te cortan el paso, quieras hacer lo que quieras.

Y cuento todo esto, porque me da pena. Todo cambió a la vuelta de la primera final. La borrachera del éxito no sentó bien. Algunos tarugos (que se consideran almirantes, porque flotan) han tomado las riendas y están destrozando mi Club. Yo me rebelo, estoy en contra y así lo manifiesto. Nos quedan pocas oportunidades de recomponer ese Sevilla, aunque cueste algunas cabezas y eso solo lo puede conseguir Del Nido tomando las permitentes medidas. En caso contrario, la situación se tornará cada vez más complicada, porque hay muchos que no vamos a consentir, que este nuestro Club, se convierta en el Cortijo de nadie. Tome usted buena nota, señor Del Nido.

miércoles, 2 de mayo de 2012

ESPEREMOS QUE SIRVA PARA ALGO

Pues si amigos, esperemos que esta enésima humillación sufrida por la afición del Sevilla sirva para que al menos esa foto con la que ilustramos el post, el año que viene sea bien distinta.

Hablar del partido es absurdo. Y lo es porque comparar un presupuesto y otro, una plantilla y otra y una entidad y otra en estos momentos es absurdo.

Estamos de acuerdo que en su Estadio nos pudieran empatar. Jugamos gran parte del partido con uno menos y cuantas excusas quieran ustedes poner. Pero lo ocurrido esta tarde en el Ramón Sánchez Pizjuán ha sido lamentable. Un repaso en toda regla.

Un equipo en el que juegan Irinei, Beñat, Pozuelo, Castro, Nacho, etc, no puede humillar al Sevilla Fútbol Club delante de sus aficionados. Pero ha ocurrido y ha sucedido porque este Sevilla 11/12 es un desastre. Un verdadero desorden en todas sus facetas. En la deportiva que es la que nos ocupa hoy, no hay más que ver el revolcón que nos ha dado un equipo con los nombres antes mencionados.

El desquiciamiento es absoluto y lo peor de todo, es que parece que los que deben de coger la puerta antes que nadie, no tienen la más mínima intención. Espero, aprovechando que hoy jugamos contra ellos, que no tenga que ocurrir como en “la casa” del vecino que hubo que desalojarlos a la fuerza. Yo confío que aquí haya más vergüenza y se marchen antes de que la cosa empiece a tomar un cariz desagradable de todo punto.

Ya hoy una vez finalizado el encuentro, los aficionados radicales del Sevilla han atacado nuestro propio autobús. Ya hemos vivido episodios de mal gusto entre aficionados y jugadores. Ahora está claro que todos los tiros apuntan a los de la foto. Espero y confío en que la cordura les hará poner la Entidad en las manos adecuadas y que se produzca un cambio completo en las estructuras del Club.

No se ha perdido un partido, que también, se han perdido dos temporadas completas con fichajes que nadie entiende. Operaciones que nadie alcanza a comprender. Se ha debilitado la platilla día a día, se ha despilfarrado todo lo que estaba en caja, esos famosos “fondos propios”. Ahora queda la mediocridad de una temporada sin competición europea y con un equipo cogido con alfileres. Y para finalizar, a los que añoran la vuelta inmediata de Joaquín Caparrós, decirles que mientras estén algunos de la foto, esta no se va a producir.