URGE UNA "TREGUA"

Cuando han pasado casi diez horas de la finalización del partido, yo sigo abducido por todo lo que he leído y oído en estos últimos días en torno al Sevilla Fútbol Club. Y pienso que llegados a este punto, alguien de una vez por todas tiene que coger el toro por los cuernos y urge que tome medidas en ciertos asuntos.

Hablar de lo deportivo, cuando la inmensa mayoría estamos de acuerdo, pues me parece “banal” hoy, pues por mucho que me lo explican, mis “entendederas futbolísticas” no dan para mucho más. Yo sigo diciendo que me parece una “aberración” que José Campaña no sea ni tan siquiera utilizado, cuando el equipo es tan “romo” de fútbol. Sigo sin comprender que el señor alineador no tenga el más mínimo nivel táctico para ser capaz de cambiar el rumbo de un encuentro y se limite, un partido tras otro, a hacer cambios de jugadores que no modifican en absoluto, lo que se está desarrollando en el terreno de juego.

Pero de verdad, que lo que menos me preocupa hoy es precisamente eso. Tenemos lo que tenemos y por mucho que se repita, los que conocemos a los responsables sabemos que no van a rectificar lo más mínimo, y seguirán apelando al resultadismo futuro, para procurar “salvar” la temporada como ya ocurriera el pasado ejercicio.

Lo que me tiene muy preocupado es la fractura social que vive la Entidad en estos momentos. Todo se ha visto aumentado en los últimos días, seguramente empujados por los malos resultados deportivos. Pero ya me parece, que al “gato” no le quedan más vidas y aquí se toman medias o cualquier día podemos lamentar una desgracia.

Dos grupos perfectamente definidos. Los que en su día adjetivé como “siwanistas” y que alentados por una nefasta política de los Medios Oficiales, que defienden todo lo que les digan que defiendan. Lo que se apuntan al carro del todo está bien, porque lo dice “fulano”. Los guardianes “cósmicos” del sevillómetro sagrado, que les aúpan a guardar con extrema vehemencia su rh puro, que es la verdadera matriz de los genes que todo sevillista debe tener.

De otro lado, los críticos del absoluto. Los que con los medios que tienen a su alcance no se cansan de denunciar a los primeros y de sacar todo su “arsenal” para desprestigiar a todo lo que huela a “oficialismo”.

Y ahí es donde yo quiero dejar mi opinión. Aquí hace falta una tregua hasta final de temporada y templar los ánimos para que el equipo al menos pueda luchar por el objetivo mientras clasificatoriamente sea posible.

Está claro que la empresa que propongo no es fácil. Para ello habrán de tomarse medidas urgentes y contundentes en ambos bandos. Si hay que “quitar” de en medio a determinados personajes, pues ya se está tardando mucho. Pero lo que yo si veo claro, es que con estas cuitas no llegaremos a ningún puerto.

Con futbolistas metidos en peleas callejeras, con cruces de insultos entre unos y otros, con reproches continuos, de unos a otros, según haya sido el resultado, defendiendo lo indefendible o simplemente chuleando al sevillista de a pie con frases como “esto es lo que hay, si lo quieres bien y si no a tú casa, sevillista de finales”.

Estoy preocupado, muy preocupado amigos. A mí me duele el Sevilla Fútbol Club exactamente igual que a ti. Ni más, ni menos. Por ello, desde este humilde rincón, le pido a nuestro Presidente que tome todas las medidas que sean necesarias para parar esta hemorragia que no nos llevará a ningún sitio. Y si para ello, tiene que prescindir de alguno que ha sido de sus más fieles colaboradores, pues que lo haga y cuanto antes mejor, porque esta situación se hace insoportable.