PARTIDO DE ALTO RIESGO

Es de todos sabido, que los partidos que nos enfrentan al Atlético de Madrid, en los últimos años especialmente, tienen el componente añadido de que suelen ser declarados de alto riesgo. Cosa normal si nos atenemos a los altercados y antecedentes que tenemos.

Buceando por Internet, pues se encuentra uno con diferentes foros, donde tienen cabida los aficionados ultras de los distintos equipos de nuestra liga. Perdiendo un poco el tiempo, pues no se puede llamar de otra manera a leer a estos desalmados, puede uno interpretar que se está calentado el ambiente en dichos foros.

Si a lo anterior, le unimos que ya desde Madrid, el jugador del Atlético Tiago (a este le diría yo como Mou de Pedro León, ¿a quién le ha empatado éste?, y lo que te rondaré morena, cuando los Antoñito Ruiz y compañía, empiecen a calentar el partido. Pues, como os lo voy a contar, estos están dispuestos para hacer una quedada con radicales sevillistas, pero no para comerse un arroz (lo de paella suena muy cursi), sino para pegarse. Y Yo me pregunto, ¿habrá que ser idiotas?. Pues sí, amigos, como ustedes lo están leyendo.

Yo aprovecho el día de hoy, en el que las noticias no son precisamente abundantes, para contaros una anécdota vivida en la Final de la Copa del Rey en Barcelona. Serían las cinco de la tarde cuando llegué a los aledaños del Nou Camp, donde había quedado con unos antiguos compañeros, de mi antigua profesión. Fuimos a una cafetería de la Avenida Diagonal, y para sorpresa nuestra estaba llena de estos energúmenos, aunque también he de reconocer que había gente normal, todos ellos, o al menos eso me pareció, aficionados del Atlético de Madrid.

En una mesa, casi pegada a la puerta de entrada, se encontraban un grupo de cinco chicas, todas con las camisetas colchoneras, y dos de ellas lloraban de forma desconsolada, mientras a las otras tres, se les notaba de forma evidente, un estado de nerviosismo, que hizo que uno de mis compañeros, se interesara por el asunto. Pues bien, les cuento el relato de los hechos, para que de este modo puedan ustedes juzgar por si mismo el comportamiento de los “muchachos”.

Una de ellas, al ser más gruesa que las demás, había sido ultrajada e insultada por un grupo de seis “elementos” componentes del Frente Atlético, que además de haberla insultado y degradado de forma injusta e innecesaria, llego a recibir algún “cachete” (así lo calificaron ellos) en plan de broma de mal gusto. Como ustedes comprenderán, cualquier persona de bien, lo que tiene que hacer es llamar, en este caso a los “Mossos de Escuadra” para que ellos tomaran la decisión que consideraran. Una vez presentes las fuerzas del orden, las chicas, claramente asustadas, optaron por no relatar lo anteriormente expuesto y simplemente decir que estaban de broma. Esta es la forma de proceder de cualquiera que se ve amenazado o simplemente, que no quiere tener problemas. Ante la acreditación de uno de mis amigos (TTE CORONEL DE LA GUARDIA CIVIL) un subinspector de los Mossos, toma declaración y solicita la identificación de los seis “delincuentes”.

Ante la proximidad del partido, nos marchamos y las chicas nos acompañaron hasta las mismas puertas del Estadio. Lo de los seis “ultras”, según me cuentan desde Barcelona, quedó en nada. Cosa normal, tal y como están las cosas hoy y ante la evidencia de falta de pruebas, pues ni nosotros pudimos probar nada, ni las chicas atendieron nuestras indicaciones para denunciar.

Nosotros también tenemos de estos seres disonantes, que llevan nuestras insignias y nuestros colores. De hecho, el pasado viaje a Braga ya dejaron su sello, costándole el dinero y la vergüenza al Club. Yo espero que los hayan identificado y expulsado automáticamente de la Sociedad si son abonados, pero sirva este pequeño e irrelevante post, como recordatorio, de que el domingo, tenemos en el Pizjuán, un partido de alto riesgo.